jueves, 28 de agosto de 2014

¿Qué sabía yo del mar?

Y es que nadie puede escapar al contacto del agua con la tierra que moldea sinfín las ánforas y las vasijas de lo que somos. Ensimismado, todo sucedió sin apenas darme cuenta, sin titubear lo más mínimo y con la frescura de la veteranía se acercó y humedeció mis pies. Ya no retrocedió más. Pero todavía recuerdo el bamboleo vertiginoso con el que me embelesaba, o era yo quizás quien ahondaba hasta sus profundidades. 


miércoles, 27 de agosto de 2014

Gatunalidad

#valla #gato.
¡Vaya gato!